El Dragón de Sacrificio
Este dragón hecho de piedra y metal, vive oculto en las selvas profundas donde aguarda dormido, paciente a que aquellos que desean pedirle un favor de muerte, sacrifiquen en su honor a tantas víctimas como muertes o desgracias deseen. Dicen, que a pesar de su naturaleza sanguinaria y cruel, llora por cada una de las víctimas a las que devora y que por eso, para ganarse su favor, exige que se le entreguen los corazones aún latientes de sus sacrificios, para así poder sentir, aunque solo sea por un breve instante, los vivos y pasionales latidos de un corazón que se le fue negado.